En República Dominicana, la Navidad se huele antes de llegar.
Se escucha en un merengue, se siente en la bulla del barrio y, sobre todo, se sirve en la mesa.
Porque si algo define diciembre en RD es la comida: cerdo horneado, pasteles en hoja, ensalada rusa, moro, telera, ponche y dulce en abundancia.
Pero detrás de la tradición existe un fenómeno interesante — y muy real:
comemos con el corazón, no con el estómago.
La Navidad dominicana es placer, sí… pero también exceso y un impacto directo en nuestro cuerpo y nuestra salud.
¿Por qué comemos tanto en diciembre?
La respuesta no es simple gula.
La neurociencia muestra que al reunirnos en familia y comer alimentos asociados a buenos recuerdos, el cerebro libera dopamina, el neurotransmisor del placer. Es decir:
comer en Navidad no solo llena el estómago, llena el alma.
Los dominicanos no servimos comida; servimos memoria.
Detrás de un plato hay infancia, abuela, música, unión.
Por eso es tan fácil repetir, y repetir otra vez.
El menú navideño dominicano: Tradición que pesa (literalmente)
Un plato típico de Nochebuena puede superar 1,800 calorías en una sola comida.
¿Por qué? Porque contiene:
Cerdo asado con piel crujiente
Pasteles en hoja
Ensalada rusa con mayonesa
Telera o pan sobao
Ponche con leche condensada (y su toque alegre)
Dulces, frutas, nueces, galletas
Y eso normalmente es antes del recalentado del 25, 26 y 27.
No por nada muchos suben entre 2 y 5 libras en diciembre sin darse cuenta.
RD vs. Estados Unidos
¿Cambiamos la comida cuando migramos?
No tanto como creemos.
En EE. UU. encontramos pavo, jamón glaseado y pie de manzana… pero aun así, la mayoría de dominicanos busca replicar el menú de casa.
La diferencia es cultural:
| República Dominicana | EE. UU. |
|---|---|
| Cena grande, tarde y entre risas | Cena puntual, más formal y menor volumen |
| Comida abundante + dominó + música | Cena más estructurada, luego descanso |
| Cerdo asado como protagonista | Turkey o ham como plato principal |
| Ponche espeso y dulce | Eggnog o vino caliente |
Lo interesante es que en USA muchos terminan mezclando culturas en el plato: pavo + ensalada rusa + pastel en hoja = identidad migrante servida en bandeja.
¿Cómo disfrutar sin culpa pero sin descontrol?
No se trata de limitar la navidad.
Se trata de celebrarla con conciencia.
Aquí algunos hacks prácticos:
✔ Sirve porciones pequeñas — puedes repetir, pero con balance.
✔ Mantén agua en la mesa junto al ponche.
✔ Si comes de noche, evita recena tardía.
✔ Agrega ensalada verde extra para equilibrio real.
✔ Camina antes o después de la cena (20-30 min).
✔ No comas por compromiso: disfruta, no acumules.
Recuerda algo poderoso:
La navidad se disfruta con el paladar, pero se paga con el cuerpo.
Conclusión
La comida navideña dominicana es identidad, cultura y herencia emocional.
No hay diciembre sin cerdo, sin telera, sin pasteles en hoja.
El reto no es dejar de comerlo, sino amarlo sin que nos haga daño.
Porque la alegría de diciembre está en la mesa —
pero la salud nos acompaña todo el año.
¿Cuál plato de Navidad dominicana no puede faltar en tu mesa — aunque engorde?
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