Diciembre, precios altos y salud en riesgo: la Navidad más cara para las familias dominicanas

A noviembre de 2025, el costo de los artículos básicos que componen la canasta familiar dominicana alcanzó los RD$48,138.35, una cifra que no solo refleja un desafío económico, sino que también expone una problemática profunda de salud pública y bienestar social, especialmente para los hogares de bajos y medianos ingresos.

Este aumento sostenido en el costo de la vida tiene implicaciones que van mucho más allá del bolsillo: afecta directamente la calidad de la alimentación, el acceso a servicios de salud, el equilibrio emocional y la estabilidad familiar, pilares fundamentales del bienestar integral.

Una canasta básica cada vez más lejana para el ingreso promedio

El crecimiento del costo de la canasta básica ha sido progresivo y alarmante. En 2018, su valor se situaba en RD$33,758.49. Para 2024, ya alcanzaba los RD$44,752.87, y en noviembre de 2025 superó los RD$48,000, marcando un incremento de más de RD$14,000 en siete años.

Este escenario se agrava cuando se contrasta con la realidad del mercado laboral dominicano. Una gran parte de la población económicamente activa percibe ingresos mensuales por debajo de la exención fiscal establecida en RD$34,685, lo que significa que muchas familias no logran cubrir ni siquiera los alimentos esenciales con su salario completo.

Desde la perspectiva de la salud, esta brecha económica genera consecuencias visibles y silenciosas que merecen atención urgente.

Alimentación deficiente: el primer impacto en la salud

Cuando el ingreso no alcanza, las familias se ven obligadas a tomar decisiones difíciles: reducir porciones, eliminar alimentos frescos o sustituirlos por productos ultraprocesados de menor costo y menor valor nutricional.

Esto provoca un patrón alimenticio caracterizado por:

  • Bajo consumo de frutas y vegetales
  • Exceso de carbohidratos refinados
  • Reducción de proteínas de calidad
  • Mayor consumo de grasas saturadas y sodio

A mediano y largo plazo, esta realidad incrementa el riesgo de enfermedades crónicas no transmisibles, como:

  • Hipertensión arterial
  • Diabetes tipo 2
  • Obesidad
  • Anemia y deficiencias nutricionales
  • Problemas gastrointestinales y metabólicos

La mala alimentación asociada a la pobreza se convierte así en un detonante de mayores gastos en salud, creando un círculo vicioso difícil de romper.

Estrés financiero y salud mental: un problema invisibilizado

El impacto del alto costo de la canasta familiar no es solo físico. El estrés económico constante, la incertidumbre y la imposibilidad de cubrir necesidades básicas generan un desgaste emocional significativo.

Entre los efectos más comunes se encuentran:

  • Ansiedad crónica
  • Trastornos del sueño
  • Depresión
  • Conflictos familiares
  • Aumento de la violencia intrafamiliar

En hogares donde hay niños, este estrés se traduce además en afectaciones al desarrollo emocional y cognitivo, bajo rendimiento escolar y problemas de conducta.

La salud mental, históricamente relegada en las políticas públicas, se convierte en una de las grandes víctimas del aumento del costo de la vida.

Menos prevención, más enfermedad

Cuando el presupuesto familiar se destina casi en su totalidad a alimentos, la prevención en salud pasa a un segundo plano. Muchas personas posponen:

  • Consultas médicas preventivas
  • Exámenes de rutina
  • Tratamientos odontológicos
  • Compra de medicamentos
  • Atención psicológica

Esto provoca diagnósticos tardíos y complicaciones que, paradójicamente, resultan mucho más costosas para el sistema de salud y para las propias familias.

Un desafío para las políticas públicas y la reforma fiscal

El escenario descrito plantea un reto ineludible para el diseño de políticas públicas en República Dominicana. La discusión de una reforma fiscal no puede desvincularse de la realidad social y sanitaria del país.

Cualquier ajuste que penalice aún más a los hogares vulnerables o a la clase media podría profundizar la desigualdad, deteriorar la salud poblacional y aumentar la carga sobre el sistema sanitario.

Desde una visión de salud integral, resulta imprescindible:

  • Proteger el poder adquisitivo de los hogares
  • Incentivar el acceso a alimentos saludables
  • Fortalecer programas de apoyo nutricional
  • Integrar salud, economía y bienestar en la toma de decisiones

¿Cómo pueden las familias proteger su salud en este contexto?

Aunque el problema es estructural, existen acciones prácticas que pueden ayudar a mitigar el impacto:

  • Priorizar alimentos básicos de alto valor nutricional (legumbres, huevos, vegetales locales)
  • Planificar compras y menús semanales
  • Reducir el consumo de productos ultraprocesados
  • Promover la actividad física en casa
  • Buscar orientación médica y nutricional cuando sea posible

La educación en salud y nutrición se vuelve clave para resistir, en la medida de lo posible, los efectos del contexto económico.

Economía y salud: dos caras de una misma realidad

El aumento del costo de la canasta familiar dominicana no es solo una cifra económica; es un indicador directo del estado de salud y bienestar de la población. Ignorar esta relación sería un error estratégico.

Invertir en políticas que protejan el acceso a alimentos saludables y reduzcan la presión económica sobre las familias no es un gasto: es una inversión en salud, productividad y desarrollo social.

En Revista VivaSalud, creemos que hablar de salud también implica hablar de economía, justicia social y calidad de vida, porque no puede haber bienestar cuando lo básico no alcanza.

Comparte tus comentarios y reflexiones en nuestras redes sociales @vivasaludrd

Viva Salud República Dominicana
Tu revista digital de bienestar, salud y prevención

Últimas publicaciones

Categorías

Hola, 👋 estamos encantados de conocerte.

Regístrate para recibir contenido interesante en tu bandeja de entrada.

¡No hacemos spam! Lee nuestra política de privacidad para obtener más información.

Tu anuncio Aquí

Llegamos a pacientes, profesionales de la salud, familias y personas que valoran la información confiable y actualizada